Las conexiones roscadas son comunes en varias industrias, desde la fontanería hasta la fabricación, y desempeñan un papel vital para garantizar la integridad de los sistemas de fluidos. Sin embargo, incluso las roscas mejor elaboradas pueden ser vulnerables a las fugas si no se sellan correctamente. Aquí es donde son importantes los selladores de roscas. Los selladores de roscas son sustancias diseñadas para sellar las conexiones roscadas, evitando fugas y garantizando la seguridad y eficacia del sistema. En este artículo, exploraremos cuatro consejos esenciales para conseguir un sellado seguro utilizando selladores de roscas.

Consejo nº 1: Elige el sellador de roscas para tu aplicación

Hay una gran variedad de selladores de roscas entre los que elegir, como la cinta selladora de roscas, los selladores de roscas anaeróbicos y la grasa para tuberías, por lo que es importante elegir el adecuado para cada trabajo. Por ejemplo, utilizar cinta de teflón puede ser adecuado para aplicaciones pequeñas o temporales, sin embargo, no es la mejor opción para aplicaciones profesionales de sistemas de fontanería, donde se requiere un sellado permanente y de alta resistencia. Los aspectos clave a tener en cuenta son

• ¿Estás sellando sistemas de fontanería o aplicaciones comerciales?
• ¿Estás sellando tuberías de gas o de agua?
• ¿La tubería estará expuesta a productos químicos?
• ¿Cuál es el material de tu hilo?

El sellador de roscas que elijas debe ser compatible con el material de la tubería y el contenido con el que vayas a trabajar. Para los aficionados al bricolaje, los propietarios de viviendas y las aplicaciones de fontanería de mantenimiento, la cinta de teflón puede ser útil para tener en tu caja de herramientas. Para sistemas de fontanería permanentes y otras aplicaciones profesionales, tendrás que buscar un sellador de roscas diseñado para una unión duradera y de alta resistencia. Te recomendamos un sellador anaeróbico como el Sellador de Roscas AS-58 de Ambro Controls. A diferencia de la grasa para tuberías (compuestos selladores de roscas), que puede agrietarse con el tiempo, los selladores de roscas anaeróbicos se curan cuando se expulsa el oxígeno para formar un sellado sólido.

Consejo nº 2: Limpia y desengrasa las roscas antes de usarlas

La grasa, la suciedad y otros residuos pueden impedir que el sellador se adhiera correctamente y provocar fugas, por lo que es vital preparar las roscas antes de sellarlas. Asegúrate de que la tubería está limpia con los siguientes pasos: Desengrasa: Si la tubería está grasienta, utiliza un desengrasante, limpiador o disolvente para limpiar bien las roscas. Asegúrate de que no queda ningún rastro de aceite, grasa o suciedad.
Frotar: En caso de contaminantes persistentes, utiliza un cepillo de alambre para fregar las roscas. Sé suave para no dañar las roscas.
Secar: La humedad residual también puede afectar al proceso de sellado. Utiliza un trapo o unas toallitas de papel para eliminar cualquier resto de líquido.

Consejo nº 3: Aplica sellador o cinta adhesiva uniformemente a lo largo del hilo

Un error frecuente en el sellado de roscas es aplicar con prisas cinta selladora de roscas o sellador líquido, lo que hace que se ponga demasiada cantidad en la rosca. No sólo aumentas la probabilidad de fugas, sino que aplicar un exceso de cinta o sellador de roscas es innecesario y un despilfarro. La cinta selladora de roscas debe enrollarse alrededor de la rosca en la dirección correcta con un mínimo de 8 vueltas. Un sellador de roscas con una boquilla delgada, como el Sellador de Roscas Anaeróbico AS-58 de Ambro Controls, facilita la aplicación de la cantidad adecuada. Con AS-58, un simple cordón continuo alrededor de una rosca es todo lo que necesitas para un sellado seguro. Para roscas sueltas o dañadas y roscas de más de 2,5 cm de diámetro, aplica sellador adicional para asegurar un sellado completo. Una vez aplicado, conecta los tubos y apriétalos.

Consejo nº 4: Espera a que el sellador de roscas se cure por completo

Cuando utilices selladores de roscas anaeróbicos como el AS-58, tendrás que esperar a que el sellador de roscas se cure completamente antes de presurizar el sistema. A diferencia de la masilla y la cinta para tuberías, los selladores de roscas anaeróbicos se curan cuando se expulsa el oxígeno y forman un sellado sólido y duradero. No dejar un tiempo de curado adecuado puede provocar fallos prematuros y fugas. ¿Lo sabías? El tiempo que tarda en curarse un sellador depende del material y el tamaño de la tubería, así como de la temperatura ambiente, por lo que el tiempo de curado es diferente para cada aplicación. Recomendamos consultar la Ficha Técnica del fabricante para obtener una estimación del tiempo que tardará en curar el sellante. El sellado de tubos de zinc M10x20 (calidad 8.8) a 77 °F requerirá de 1 a 3 h para un tiempo de curado funcional con AS-58.

Conseguir un sellado seguro con selladores de roscas es esencial para la funcionalidad y seguridad de los sistemas de fluidos. Seleccionando el sellador adecuado, preparando correctamente las roscas, aplicándolo con cuidado y dejando un tiempo de curado adecuado, puedes asegurarte de que tus conexiones roscadas sigan siendo estancas y fiables. Seguir estos cuatro consejos esenciales te ayudará a hacer bien el trabajo a la primera, ahorrándote tiempo, dinero y posibles dolores de cabeza en el futuro.